Toros, gallos, canción y tequila

Emiliano Gironella Parra ha dedicado siempre una parte de su trabajo artístico a destacar las tradiciones y costumbres populares, recreando con talento e ingenio las atmósferas que las dotan de vida. A los toros y la canción ya abordados en su obra, agrega en esta exposición los gallos y el tequila. Un ojo no experto sino de espectador en un recorrido por el catálogo de la exposición podría fijarse en el color rojo del capote del torero y de la sangre que brota del lomo del animal y asociarlo con la bravura de ambos; en las plumas alborotadas y a veces en el aire como evidencia de un duelo a muerte entre los gallos; en las manos de los mariachis ocupadas en pulsar las cuerdas de los instrumentos y en la boca abierta como un túnel para dejar claro que cantan a todo pulmón acompañados de la música en un ambiente de fiesta, donde seguramente los reunidos brindan con la bebida nacional: el tequila.

Toros, gallos, canción y tequila fue presentada en la hacienda La Rojeña, Tequila, Jalisco, en 2001. En apoyo al arte joven mexicano, la casa José Cuervo pidió a Emiliano tres obras para el estampado de las cajas coleccionables tradicionales de este tequila en su edición 2001. Formaron parte de esta exposición las tres cajas que llevan impresa la obra de Emiliano, los originales a partir de los cuales se hicieron las serigrafías, así como 18 obras, entre las que se encuentran nuevas creaciones en torno al tema de la exposición y algunas composiciones pictóricas en las que ya lo había abordado. Las técnicas utilizadas fueron grabado y talla en madera, encáustica, monotipo, óleo, acrílico y temple sobre lino, papel y tela, combinadas algunas y otras solas. En los originales para las serigrafías de los estuches tequileros Gironella Parra empleó los siguientes procedimientos y recursos: encáustica y grabado en madera; monotipo, grabado en madera con encáustica, y aguafuerte encáustica sobre madera.